domingo, 28 de octubre de 2012

¡¡QUE MALA SUERTE!!




El no a todo.
Que mala suerte tiene el Norte de Tenerife. ¿Por qué será? Esta es la isla del no a todo. Cuando no es por el lagarto es por la tabaiba porque están protegidos y si no  por el gusano que se tiende al sol a eso del mediodía. Y así nos va. No se si ese gusano está protegido. Es probable.

 En otras islas que no hace falta nombrar, no hay ese problema, o no hay gusanos o no hay tabaibas o lagartos que proteger. Parece que todos los gusanos están aquí o pasan por aquí cuando se proyecta una obra.
Pero cuando Tenerife tiene la suerte de que algunas de esas obras logran salir adelante, aparece otro gusano. El económico. Ahora llamado crisis.
Falso túnel del Anilloa su paso por Genovés
El Anillo Insular está proyectado hace “mil” años. Para que viera la luz tuvieron que pasar otros "mil" y después de otros "mil" ejecutándose se acaba el dinero y al parecer y según las “malas” lenguas no hay más dinero del Estado para acabar la obra. ¡¡Qué mala suerte!!
Con el hospital del Norte nos está ocurriendo lo mismo, ahí está, funcionando a medias, y gracias, al parecer, al esfuerzo de alguna institución insular.
El estado de la carretera TF82  desde Icod de los Vinos hasta el municipio de El Tanque, es simplemente lamentable. Apenas en su larga historia se han modificado un par de curvas, las demás siguen ahí. Si vamos en coche y tenemos la mala suerte de que desde Icod de los Vinos hasta el Tanque, nos toque un camión delante, no podremos adelantarlo nunca, ya que no hay una recta lo suficientemente larga para hacerlo, porque las pocas que hay son muy cortas y siempre vendrá de frente algún vehículo.
Para más escarnio, esta carretera se ha ido llenando de socavones que se han ido parcheando como se hacia antiguamente, grava y piche en el hoyo y cuando pasa un camión y lo pisa, ahí queda nuevamente el hoyo.
Tramo Aniilo Insular Genovés, La Vega
Y otro caso para empeorar la situación, son las tapas de los imbornales que están en el tramo de carretera  que va desde el cruce de La Vega hasta Las Canales en Icod de los Vinos, que asoman por encima del asfalto y que parecen cuchillas. Como tengamos la mala suerte de que una rueda de nuestro coche tenga que pasar por encima de una de esas tapas, corremos el riesgo de que corte un neumático y haya un reventón. No es bueno ni siquiera pensarlo.
Si ahora no hay dinero para acabar el Anillo Insular según se insinúa por ahí, ¿Qué se hará con la TF-82? ¿Alguien se dignará entonces a quitar tanta curva, reparar el asfalto y construir algún carril para los adelantamientos?
 Desde el Cabildo  y desde el Gobierno Autónomo, se ha de hacer un esfuerzo para que esta obra se termine cuanto antes, para que los ciudadanos del Norte, podamos acceder a nuestros puestos de trabajo sin tener que madrugar tanto para ello, salvo que nuevamente el lagarto, la tabaiba o el gusano de la crisis se opongan.


sábado, 13 de octubre de 2012

MIRADOR DE GENOVÉS, LUGAR DESOLADO

Cactus con picos, lo mejor para un mirador

Pasa el tiempo y Genovés nuevamente pierde el auge que recobró una vez no hace mucho, después de muchos años de olvido por la Administración garachiquense, llegando incluso, un ilustre alcalde, a reconocer que Genovés era la Cenicienta del municipio.
Estas palabras dichas por este buen alcalde amigo de todos los genovénses de bien, hizo que el y su grupo de gobierno formaran un equipo de trabajo que, pasados unos pocos años llevó a Genovés a estar a la altura que le correspondía. Asfaltado de calles, consultorio médico, centro cultural, polideportivo, colegios, etc.
Pero como no hay dos sin tres, cuando este alcalde dejó de serlo, vino nuevamente a Genovés la desolación, siendo nuevamente un barrio abandonado sin tener a nadie que lo defendiera y que luchara por el, no para quitarle nada a otros barrios, sino para darle a Genovés lo que le pertenecía. Por cierto este alcalde al que todos queremos por aquí se llama don Lorenzo Dorta, al que Dios le de mucha vida y que goce de buena salud.

Tuvieron que pasar algunos años para que Genovés tuviera que recomponerse y con otro buen alcalde en el Ayuntamiento, Genovés trabajó   para ser un lugar  en el que sus vecinos pudiesen vivir con dignidad. Y se consiguió a pesar de la enorme deuda que tenía contraída el Ayuntamiento. Este alcalde fue don Ramón Miranda, también muy querido en Genovés y al que desde aquí también le deseo todo lo mejor.

Turistas contemplan el paisaje
Han pasado algunos años no desde que don Ramón Miranda dejara la alcaldía, si no unos años después de que Genovés comenzó a recuperarse y empezó nuevamente el declive y eso no debemos permitirlo. Y no se trata de ir en contra de nadie si no que poco a poco nos vamos acostumbrando a ver las cosas deterioradas y al final lo damos como bueno y yo ante eso me resisto y protesto. Lo siento, pero yo quiero mucho a mi barrio porque es el lugar en el que he nacido y vivo y he luchado todo lo que he podido o me han dejado.
Pondré hoy un caso, en otro momento diré otras cosas: Ya lo mencioné en otro artículo hace unos meses con motivo de la inauguración del puerto deportivo y pesquero de Garachico.  

El caso al que me refería con motivo de la inauguración del puerto deportivo y pesquero, es el estado del mirador de Genovés. Este mirador es visitado constantemente por propios y extraños, es difícil pasar por allí sin comprobar que hay alguien contemplando Garachico, toda la costa de la Isla Baja y haciendo fotografías. Pero el estado del mirador es simplemente lamentable.

Una jardinera cayó o algún desaprensivo la tiró al vacio. Estuvo el lugar sin jardinera muchísimos meses hasta que decidieron, no poner otra jardinera sino un murete. ¡¡Muy bonito!! Pintadito de blanco y todo, que bonito. ¿Y por que no otra jardinera?
Las “cuatro” jardineras que quedan, instaladas todo sea dicho de paso, cuando gobernaban los socialistas que fueron quienes construyeron el mirador, siguen con los cactus originarios colgando resecos por la falta de agua que padecen. Para este lugar no se pudo elegir  mejores plantas, ¡¡cactus con sus pico y todo!! Dos papelera medio retorcida recogen los papeles que el buen visitante tiene a bien depositar allí y nada más. No he visto en lugar alguno de Garachico un mirador así. Pero claro, estamos en Genovés y para Genovés cualquier cosa vale.
La Isla Baja y la isla de La Palma al fondo
¿Esto es acaso un lugar que llama al turismo? ¿Es esto un lugar digno para que el visitante observe un lugar tan bonito e impresionante como es toda la costa de la Isla Baja teniendo sus pies el nuevo y flamante puerto y el casco urbano de la Villa y Puerto de Garachico? No, no lo es, ni lo es para Garachico ni lo es para Genovés.

¿Cuál puede ser el costo económico del arreglo de mirador para las arcas municipales? Pues nada, una miseria. Solo se necesita quitar el asqueroso murete que sustituyó a la jardinera y poner otra en su lugar, unas pocas plantas que embellezcan el lugar, unas nuevas papeleras y algo de pintura, pero sobre todo ganas. Nada más, no se trata de hacer grandes inversiones económicas. Por aquí no somos exigentes.

Como vecino de Genovés, me apena enormemente tener que escribir esto porque son cosas que no hace falta que nadie lo diga, pero como el tiempo pasa y nadie le pone remedio, pues hay que denunciarlo.

Los vecinos de Genovés y demás barrios de medianías de Garachico no debemos de caer en el abandono, y lo repito, no se trata de exigir grandes inversiones, sino de mantener lo que tenemos como se hace con los barrios de abajo. ¿No es bonita la entrada del barrio de Las Cruces o del Guincho y La Caleta de Interián, o el mirador de San Pedro de Daute? Pues por aquí arriba no queremos más, pero tampoco menos