¡¡BASTANTE QUE ME ALEGRO!!

Como diría un personaje canario del humor, “bastante que me alegro”

Baya batacazo se llevaron los políticos de los partidos más conocidos. Ellos que creían que estaban por encima del bien y del mal, se han llevado un palo de mucho cuidado y lo que les queda si no cambian pero ya, porque el tiempo corre en su contra y se les echa encima.

Nosotros, los terrenales, no entendemos el por qué, los políticos no escuchan al pueblo. Se creen que porque les hemos dado el voto, pueden hacer con él lo que les venga en gana. Que equivocados están.

No se dan cuenta los políticos de que han pasado los años y que ya vamos todos siendo mayores de edad en eso de la política y que ya el tiempo de comernos el coco también ha pasado, que ellos también “han pasado” porque los años no solo pasan por la población terrenal sino también por los políticos que se creen dioses, pero ellos siguen anclados en sus ideas infantiles aunque lleven en el machito desde que hicieron la Primera Comunión, porque para ellos si que no pasa el tiempo. Siempre son los mismos, las mismas caras, las mismas formas, las mismas ideas… Ya no ilusionan al pueblo ni saben hacerlo porque todo se acaba, y se cansan.

Hace falta que llegue a la política gente nueva, que todos estos “barones” desaparezcan, que den un paso a un lado y que se modifique lo que sea para que la población pueda elegir a sus representantes directamente. Que el que gana las elecciones sea el que gobierne durante el tiempo que la Ley lo permita sin que se pueda manipular la decisión popular con triquiñuelas o mociones de censura. Todo eso le repatea el hígado a la ciudadanía, que estamos ya cansados de que hagan con el pueblo lo que les venga en gana.

Pero sobre todo, que escuchen al pueblo, para eso están, para eso los hemos puesto ahí. ¿Acaso los alcaldes y concejales que son los más cercanos a la ciudadanía no les comunica a sus partidos respectivos el sentir popular? ¿O, si lo hacen pero no se les escucha?

Pero mucho nos tememos que nada va a cambiar y que ese garrotazo, -que ellos dicen que no se puede extrapolar, palabra mágica- va a ser dentro de pocas semanas agua pasada, porque ellos olvidan pronto, tienen ese don. Lo llevan en la sangre, porque el pueblo no les importa, solo les importa su yo y el sillón.

Estaremos muy atentos. De momento a muchos les está doliendo algunas partes del cuerpo, porque el leñazo ha sido tan fuerte, que están a base de ungüentos y pastillas para disimular.

Es como cuando te caes al suelo, das un brinco y miras para todos lados para ver si alguien te vio, pero por dentro, estás rechinando.

 

 

 

 

VOTAR EN LIBERTAD

Viendo como están las cosas en nuestra España por culpa de la política, hoy que es día de ir a votar, no hay ganas algunas de hacerlo, solo dan ganas de quedarte en casa y más como está el tiempo por esta parte de la Isla.

Pero creo que debemos de ejercitar nuestro deber como ciudadanos e ir a votar para ver si entre todos, poco a poco, ponemos las “cosas” en su sitio, aunque creo que pocas esperanzas de eso hay.

Todos quieren llegar al poder.

Ver la unión que hay en España expresada a través del fútbol creo que a una inmensa mayoría de españoles nos agrada, pero ¿cómo es posible que esa unión no se consiga por la defensa y la unidad de España? Es inadmisible que un país como  España se encuentre tan dividido cuando en realidad, y a la altura en que nos encontramos, y con lo que nos costó conseguir una democracia debería de ser todo lo contrario. ¿Qué sangre corre por las venas de algunos ciudadanos españoles para que esa ansiada unión no se consiga? ¿Qué mal ha ocasionado España en las mentes de estas minorías para que con su comportamiento radical lo único que consigan es dividir a todo un pueblo que tiene más de cuarenta y cinco millones de habitantes. ¿Hasta cuándo vamos a estar sometidos a esa “dictadura” violenta y radical en que su único objetivo es romper el país? Eso no es ser demócratas, eso tiene otro nombre.

Por todo esto y por otras muchas cosas que hoy no mencionaré voy a ir a votar. Y votaré por lo que me dicte mi conciencia, en libertad, como debe ser en un país libre, sin dejarme llevar por cantos de sirenas y canta-mañanas que pululan por doquier a la vuelta de cada esquina. Porque viendo como está España, quiero que cambien para bien muchas cosas, aunque estas elecciones sean europeas.

Hoy ejerceré una vez mi derecho a elegir a mis representantes aunque después ellos con mi voto hagan lo que les venga en gana como siempre, pero iré a votar porque es mi deber y mi obligación como ciudadano.

PORTUGAL, EL GRAN DESCONOCIDO

Bien sabido es de todo el mundo, que el país hermano de Portugal no lo está pasando nada bien debido a la crisis. ¿Pero, qué país lo está pasando bien?

Sin embargo resulta admirable ver como Portugal conserva aún ese “arte” perdido en los países llamados avanzados. Pero avanzados… ¿En qué sentido?

La falta de valores y la falta de respeto entre otras cosas no han llegado al país luso. Aún se puede comprobar cuando te diriges a alguien para preguntarle algo, como  esa persona a la que nos dirigimos si está sentada se levanta y nos atiende con amabilidad, o se puede ver en una iglesia como se levanta de su banco una señora y coge a alguien del brazo y le hace un lugar en su mismo banco.

Se puede comprobar con cierta nostalgia como en una gran ciudad cada vivienda tiene en su exterior su parcela de terreno que se está cultivando. Se puede ver también como todos los ciudadanos cuidan su entorno con jardines con plantas y flores. En Portugal la agricultura no está abandonada aunque sea dentro de la urbe. Todo lo contrario.

Si nos adentramos en el Portugal desconocido, el que no está en las guías turísticas y visitamos sus poblados alejados de las ciudades, veremos con que mimo y esmero se cuida el tema agrícola. Personas muy mayores ya jubiladas que están cobrando una mísera pensión dedican lo que les queda de vida, y a veces con la saludad resquebrajada, a cultivar sus terrenitos para poder llevar a sus hogares el sustento diario porque con sus pobres pagas no lograrían llegar a fin de mes.

Las carreteras son buenas, sus casas, en la mayoría de los casos son buenas y vistosas, los coches que circulan por las carreteras suelen ser de alta gama o al menos de cierto valor. Pero lo que realmente llama la atención aparte de lo antes descrito, es la educación y el respeto que se siente no solo por los demás, sino por ellos mismos, por su patria, por sus costumbres y sus creencias.

En Portugal no esconden ni se avergüenzan de sus símbolos, ni de su bandera, ni de su religión, ni del Himno Nacional. Por lo tanto ¿Qué país es más avanzado, el nuestro que ha perdido todo o Portugal que ha sabido conservar ese aire de respeto que antaño existiera entre nosotros los españoles?