¡¡ESPAÑOLES: FRANCO, HA RESUCITADO!!

Parece mentira que aún hoy y pasados casi cuarenta años haya gente que siga recordando a Franco.

Cuando ya todos los españoles queremos pasar pagina de una maldita vez, aún hay políticos y politiquillos – jóvenes cachorros- que siguen con la matraca del recuerdo del pasado, parece que les gusta Franco.

Por si alguien en España lo ignora aún, se los voy a recordar. Franco está muerto desde el año 1975 y enterrado bajo una losa de 1.600 kilos en la basílica del Valle de los Caídos. Y punto.

Bandera rojigualda. La que muchos hemos besado.

Pero algunos aún no lo quieren saber o lo quieren desenterrar porque eso les da rédito político y sacan al Muerto cuando les conviene. Pero como son unos ignorantes e ignorados quieren seguir en la palestra y no se dan cuenta de que eso a los españoles ya nos resbala y que lo único que queremos es mirar al futuro, sin el retrovisor que  nos esté continuamente recordando al “dictador”.

España está pasando desde hace años por una mala situación a todos los niveles y las cosas no se arreglan mirando hacia atrás como lo están haciendo continuamente muchos de nuestros políticos. A España no la arreglamos así, cada uno por su lado, tenemos que ser un puño, luchar unidos –cosa difícil para cierta casta- por un bien común y dejarnos de estira y afloja. Dejar a Franco ya descansar en paz y sobre todo dejarnos descansar de tanta insolencia, bobería y gansada a todos los españoles.

Dicen que es que Franco ocupa en la basílica del Valle de los Caídos un lugar de privilegio, ¿y que? Si toda esta gente no cree en la Iglesia, ni en Dios, ni en nada, ¿por que les preocupa que Franco o José Antonio Primo de Rivera estén sepultados en la Basílica?

Dejen en paz a los muertos, pero sobre todo déjenos en paz a los vivos, cómprense un barco y desaparezcan, o pensándolo mejor, ¿Por qué no empiezan a trabajar de una vez y así se ganan el sueldo que se están llevando de todos los españoles, aunque algunos no quieran saber nada de España y la desprecian?

También tengo algo para los “jóvenes cachorros” que de todo saben y de todo opinan. Escuchen, lean, estudien libremente. Luego podrán opinar con rigurosidad.

Que nadie venga a romper la libertad por la que muchos hemos luchado y que a otros poco les ha costado porque todo lo han tenido hecho.