sábado, 13 de diciembre de 2014

UNA MAÑANA DE PERROS

Atasco en autopista  Tenerife Norte a La Laguna -Foto: blog Gran Atasco Tenerife-

De todos es sabido que viajar del el Norte hacia Santa Cruz en horas mañaneras, es cosa complicada por la cantidad de tráfico que existe en la autopista a intempestivas horas, pero yo ignoraba porque a esas horas nunca había tenido la obligación de hacerlo, que eso fuese como es.

Salimos temprano de Garachico, seis menos cuarto de la mañana destino La Laguna, todo iba bien hasta que llegamos a la altura del Mirador de Humbolt, La Orotava, allí estaba el atasco, los dos carriles de la autopista a tope de coches parados totalmente.

Avanzábamos paso a paso y metro a metro y mirabas de reojo a los compañeros de viaje que iban en otros vehículos y podías observar como con resignación se tragaban la mala leche que esto suponia. Así continuamos hasta llegar a La Laguna, nunca hubo un momento de respiro para decir, aquí puedo acelerar y recorrer aunque sea un kilometro con el coche en marcha. Juro que en momento alguno se dio este caso.

¿Cómo es posible que a estas alturas el norte de Tenerife esté de esta manera y a nadie se le ocurra ponerle solución. ¿Es que acaso los de aquí somos gente de otra categoría? ¿Es acaso que los políticos del Norte no viajan a Santa Cruz por las mañanas? ¿O es que como se lo pueden permitir, viven en la capital para ahorrarse todo este berenjenal?

Pobres de aquellas personas que por motivos laborales tengan que desplazarse todos los días a Tocoronte, La Laguna o Santa Cruz, porque lo mío fue un caso aislado, pero ¿Y el trabajador?

Creemos los norteños que ya está bien, ya basta. ¿Cuándo será el día que en el Cabildo o en el Gobierno de Canarias haya media docena de personas del Norte de Tenerife elegidas por el pueblo que estén dispuestas a pasar por el sufrimiento que pasamos el resto de terrenales para que gocen en sus carnes lo mal que está la situación en este norte abandonado?

También entendemos por aquí, que cuando se intenta hacer algo, salen los del no a todo, esos se oponen a cualquier cosa con tal de joder la paciencia porque normalmente no son gente del Norte sino de la metrópoli o cercanías, y estos problemas a ellos no les afecta para nada. Lo único que les interesa es venir los fines de semana con sus buenos coches echando humo porque usan derivados del petróleo para contemplar nuestro paisaje.