viernes, 21 de octubre de 2016

DE LA TIBIEZA A LA INDIGNACIÓN

Estos días se está hablando y mucho sobre las manifestaciones vertidas por el Presidente del Cabildo de Tenerife don Carlos Alonso. Y es que al parecer estás manifestaciones no han caído nada bien sobre todo en algunos de sus propios compañeros de partido y como es lógico nada bien en la oposición.

Al parecer el Sr. Alonso es el único político en Canarias que ve el estado en que se encuentran entre otras cosas las carreteras de la Isla y a veces decir la verdad es algo peligroso y complicado porque se puede desatar nuevamente el llamado pleito insular que no es otra cosa que, Tenerife, calladito la boca y punto y así estamos todos en paz.

Mientras Tenerife permanezca tibio y no se altere, las Islas Canarias no tendrán pleito insular pero, ay como Tenerife se atreva a abrir la boca…

9:00 a.m. atasco TF5 a la altura de Tacoronte.
Entonces ¿Qué hacer, permanecer callados y aguantando para no incordiar y poner en peligro algún que otro pacto? Pues no, ya está bien, ya basta. Tenemos que reivindicar lo que nos corresponde y dejarnos de tanta manipulación, que nos quieren hacer tontos y si seguimos así, así nos volveremos, si es que ya no lo somos.

No podemos permitir que a las nueve de la mañana de cualquier día laboral esté la TF5 aún colapsada como está ocurriendo entre el Sauzal y Tacoronte. No podeos permitir ni un día más que se ningunee en los medios de comunicación canariones a Tenerife, y todo el mundo sabe a quién me refiero. No vale la pena poner la televisión para ver las noticias de nuestro archipiélago, ¿para qué? De Tenerife apenas se dice nada y no es que me invente esto, es que se ve a diario. Salvo alguna excepción.

Tenemos dos aeropuertos en Tenerife. Del Reina Sofía nunca se dice nada y cuando se habla de la entrada de turistas a nuestra Isla, entonces sí, pero solo se menciona este y se oculta el del Norte  nunca se dice el número de turistas que entra en la Isla por los dos aeropuertos, entonces pasan al de Gando y lo ponen por las nubes. Y lo mismo pasa con los puertos.

Otra de las cosas más sonadas es el dichoso anillo insular. ¿Cuántos años más han de pasar para que esta obra se vea concluida? ¿Cuántos problemas, algunos inventados, se han de subsanar para acabar con este mal diario que asfixia al tinerfeño que se tiene que desplazar a todos los días, desde el Norte para su trabajo cotidiano? ¿Aparecerá ahora algún ecologista que descubra el ciempiés marciano al que hay que proteger porque es único en la Tierra y tiene su hábitat precisamente en el futuro túnel de Erjos.

De la tibieza del tinerfeño, se está pasando a la indignación y  cada día está más a flor de piel ese malestar porque nos están cansando ciertas cosas que cada vez vemos con más frecuencia en detrimento de la Isla de Tenerife, y si no apoyamos al Sr. Alonso en esto, no tendremos en Tenerife un líder que encabece la defensa de los intereses de todos los tinerfeños porque por lo que se ve, muy poquitos políticos se atreven a hacer lo que él ha hecho. Simplemente pedir para su Isla lo que él ve que se necesita.